La vocación misionera específica está definida en nuestro Instituto desde su fundación. El P. Zegrí, ya en 1883, dio respuesta a esta necesidad de la Iglesia, y continuó inculcando y fomentando esta dimensión en el Instituto. Decía: La caridad, que es Dios, no ha pasado. Su influencia no concluirá mientras haya regiones lejanas que evangelizar, sudores que verter y sangre que derramar, para fecundar las almas y engendrar la verdad en la tierra. Dentro de la fidelidad siempre renovada al carisma el Fundador, viviremos la vocación misionera específica en actitud de generosa disponibilidad. Nos esforzaremos en responder a las necesidades y compromisos más urgentes de la Iglesia. Const. 72

¡Qué alegría poder celebrar con Sor Ana María Briones Magaña, junto con las hermanas , y con todos los amigos y conocidos los 50 AÑOS de su llegada a Perú, gracias por su vocación misionera, y el inetrés de ir haciendo crecer el Reino de Dios y derramar merced de Dios en todas partes!  Gracias, por su testimonio de vida.